''Los niños no lloran''.¿Dónde vas con esa camiseta rosa? Cuando Juan decide dejar de hacer cosas de niña, ¿por qué es como si le faltase algo de sí mismo? El Hada Menta le ayudará a encontrar su otra mitad y así poder ser un niño entero.

Pablo disfruta de una vida bastante cómoda, pero está un poco encerrado en sí mismo. Por eso el padre le llama "caracol mutante". Naísma es una niña saharaui procedente de un campamento de refugiados, le contará los secretos de los gigantes de la luna, que no consistirá, como él creía, en un barco repleto de plata, sino... en otra cosa.

Me gusta no cuenta realmente una historia. Es, simplemente, un manifiesto de la capacidad de disfrutar de cosas accesibles a todo el mundo. Una fiesta de los sentidos. Verbos como vivir, ver, oler, oír, comer, dormir, soñar, jugar, plantar, pintar, imaginar, escuchar... y sustantivos como luna, sol cuento, pirata, mar, juguete, risa, rosa, tierra, árbol, mano, aire, flor, castillo, peonza, playa, gato, chocolate...

Andrés está harto del colegio, de los granos, del rollo de su madre, de la plasta de su hermana, de Jorge el birlanovias, de la vida en general y del profesor de historia en particular. Pero Dani y él se han propuesto cambiar el mundo y han hecho un conjuro que les hará inmunes a las fantasmadas de pijos, pelotas y demás aves carroñeras y los convertirá en héroes. Bueno, al menos eso es lo que estaba previsto. Si luego las cosas se tuercen...

Mey cree que no todas las personas tienen necesidad de besos y caricias pero el Hada Menta la convence: son tan importantes como comer y dormir. Mey demostrará a Quica, una niña que siempre hace daño, molesta a los demás y que dice que le dan asco los besos y las caricias, que ella no es ninguna excepción y que el contacto físico es fundamental para todas las personas.