El señor Rutin llevaba una vida tranquila y ordenada en su ciudad natal de Visby, en la isla sueca de Gotland. Trabajaba de recepcionista en un hotel, su hermosa mujer lo quería y sus hijos gemelos eran su alegría. Pero, de pronto, un día se dio cuenta de que algo no funcionaba. Me aburro, se dijo, y a continuación decidió que necesitaba un cambio... un cambio que le proporcionaría una nueva vida.

Todo empezó en Londres, la noche en que nuestro padre hizo explotar el Museo Británico con un extraño conjuro. Fue entonces cuando nos enteramos de que, además de un reconocido arqueólogo, era una especie de mago del Antiguo Egipto. Rodeado de valiosas antigüedades, empezó a entonar extrañas palabras... Algo debió de salir mal porque la sala quedó reducida a escombros; Set, el dios del caos, apareció de la nada envuelto en llamas y a nuestro padre se lo tragó la tierra...

Úrsula es una niña que ha cambiado muchas veces de colegio. Tiene una caja con lombrices y un gato en el espacio. Rebecca es una agente secreta. Tiene un blog y las uñas de los pies verde esmeralda. Sofía es como Úrsula, pero con pendientes grandes y muchos admiradores. ¿O se parece a Rebecca? Bueno, quizá algunas de estas cosas no sean verdad...o sí... Pero ¿es que hay alguien capaz de contar siempre siempre la verdad?

A Berta le suceden las cosas más increíbles. El caso es que pertenece a una familia normal, va al colegio, celebra la Navidad, le gusta el chocolate, se le cae su primer diente... como a cualquier niña de su edad. Sin embargo, hay algo en ella que hace que todo sea más complicado, pero también más divertido.

Matt acaba de mudarse a Pittsburg, una ciudad pequeña y tranquila de Estados Unidos. Todos los días, coge el autobús escolar con su mejor amigo Brian.